El 25 de Julio de 1978, nació el primer bebé mediante Reproducción Asistida. Año 2019, 41 años después, la Reproducción Asistida sigue siendo tema tabú en la sociedad. Al menos, no se trata con la normalidad que se debería.
Pero nuestra sociedad sí se ve en el derecho de presionar a la mujer a tener que desarrollar su papel de madre. Sin embargo, nos encontramos con casos que para conseguir un embarazo exitoso tienen que superar obstáculos. En una pareja heterosexual, bien la mujer (30%), bien el hombre (30%) tienen problemas de infertilidad. Por causas mixtas nos encontramos con un 25% de casos y por razones desconocidas un 15%. En una pareja homosexual, evidentemente, se necesita de la otra parte, bien un espermatozoide o bien de un óvulo. Al igual que aquellas mujeres que desean ser madres solteras, necesitan de un espermatozoide.
Y, por supuesto, tenemos los casos de mujeres que no tienen el instinto maternal, las cuales también son juzgadas e infravaloradas por la sociedad. Pero este tema lo trataremos en otra ocasión.
Las causas de que la tasa de infertilidad esté aumentando, estando actualmente en el 17% de la población con edad de tener hijos, son los hábitos de vida, el sobrepeso, la contaminación ambiental…
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- En el caso de la mujer, las causas más comunes son la edad avanzada (pues cada vez se atrasa más el momento de ser madre), lesiones en las trompas de Falopio…
- En cuanto al hombre, suele ser alteraciones en la producción de semen, la obesidad, problemas de erección…
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Es decir, la Reproducción Asistida, es nuestra solución a todos estos casos, que actualmente, son tan comunes y que se siguen ocultando, por miedo a ser juzgados.
Nuestros pacientes, llegan a consulta emocionalmente agotados. Deseando escuchar que sí hay solución para ellos, que tras el proceso y días de espera, finalmente tendrán a su bebé en brazos. Necesitan encontrar apoyo emocional, tanto dentro como fuera de la clínica de Reproducción Asistida. Y, para nada les ayuda preguntas o comentarios como: Cuándo un bebé… se pasa el arroz… y, tenéis problemas… de quién es la culpa….
Sinceramente, ¿no pensáis que sería mucho más fácil para esas personas que necesitan de estas técnicas, que se las comprendieran, o simplemente no se las juzgaran? Y, que la Reproducción Asistida se tratara de lo más natural posible. Porque gracias a ello, muchas mujeres y muchos hombres saben lo que se siente al tener a su hijo entre sus brazos, el olor a pureza que transmite un bebé y poder guardar eternamente en sus retinas esa mirada dulce y esa sonrisa sanadora que solo un hijo sabe regalar a sus padres. Y para llegar ahí, ¿qué más da que sea de forma natural o mediante una técnica? Lo importante es poder cumplir nuestro sueño de ser madre y/o padre.
María Barahona. Psicóloga